La cordillera de los Vosgos, frontera natural entre Alsacia y Lorena, es la encargada de concluir el Tour de Francia 2023 antes del colofón final en los Campos Elíseos. Esta vigésima jornada acaba en la estación de esquí de Le Markstein, que estrena su condición como final de etapa en la prueba masculina de la ronda gala. Hasta el año pasado tan solo había sido un sitio de paso, tanto en 2014 como en 2019, pero en 2022 fue el lugar en el que Annemiek van Vleuten completó su exhibición en la séptima jornada para conseguir la victoria en la primera edición del Tour de Francia femenino.
Este 2023 se presentaba como una jornada para emboscadas y para plantear movimientos tácticos y tratar de dar un vuelco a la general, pero la solidez de Vingegaard en el bloque alpino y el desfallecimiento de Pogačar en el Col de la Loze reduce el interés al triunfo de la etapa. El esloveno ya mostró su ambición por querer buscar la victoria, por lo que si ha recuperado fuerzas, el equipo UAE Team Emirates intente controlar la fuga y que Pogačar concluya el Tour con un buen sabor de boca en un recorrido que le beneficia. Quizá también sea una jornada con batalla por la tercera plaza del podio entre Adam Yates, Carlos Rodríguez, Simon Yates y Pello Bilbao, que se encuentran a poco más de dos minutos de diferencia.
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Hora de salida: 13:30h / Hora prevista de llegada: 17:10h
Recorrido de la 20ª etapa: Belfort - Le Markstein (133,5 km)
Esta vigésima etapa será corta, con poco más de 133 kilómetros de recorrido, pero acumula más de 3.600 metros de desnivel a través de los Vosgos. Nada más arrancar, tras un pequeño tramo llano desde Belfort, llega el primer puerto de la jornada, el Ballon d’Alsace (ver en Strava). Es una ascensión larga (11,5 km), pero muy tendida con pendientes siempre rondando el 5%. Sería el punto para que una fuga, en la que es posible que veamos a Giulio Ciccone y Felix Gall pelear por los puntos del maillot de la montaña, tratase de hacer camino y consolidar la diferencia tanto en el descenso como en la zona más favorable del día atravesando el esprint intermedio de Fresse-sur-Moselle.
Esta primera fase da paso a un tramo central muy exigente con hasta tres subidas y un terreno quebrado, con pequeños repechos, que mantiene una dinámica ascendente. El Col de la Croix des Moinats (5,2 km al 7%) es la puerta de entrada a estos 30 kilómetros en los que se suceden la ascensión al Col de Grosse Pierre (ver en Strava), con un kilómetro a más del 11%, y el Col de la Schlucht, con 1,5 km duros y una parte final más suave. Un descenso largo, de más de 20 kilómetros, permitirá a los ciclistas hidratarse y comer antes de afrontar el encadenado definitivo de Petit Ballon y Col du Platzerwasel.
También puedes ver el segmento en Strava
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El primer puerto será el más largo, con una longitud de 9,3 km y una pendiente media del 8,1%. La parte más exigente serán los dos kilómetros iniciales, con porcentajes que no bajan del 10%, mientras que el resto de la ascensión se mantiene estable en torno al 7-8%. El descenso será estrecho, con carretera rugosa y zonas que enlazan varias curvas técnicas. Conecta de forma consecutiva con el Col du Platzerwasel (7,1 km al 8,4%). Y esta subida, inmersa en la frondosidad del bosque, será decisiva en la lucha por la victoria de etapa. Es un puerto constante en sus cinco primeros kilómetros, con máximas que superan el 10%.
Tras un pequeño falso llano al 4,5%, el kilómetro final es el más duro de todos con rampas que se mantienen siempre superiores al 11%. Pero una vez coronado no hay descenso, sino que la carrera continúa ascendiendo durante dos kilómetros al 7% y entra en una meseta favorable de 6 km hasta la línea de meta de Le Markstein. Quien consiga abrir un hueco en la parte más exigente de Platzerwasel tendrá prácticamente todo el trabajo hecho para alzar los brazos.
Imagen de cabecera: Pauline Ballet / A.S.O.