Arranca el momento culminante de este Tour de Francia femenino. Llega la montaña a la carrera francesa a través de la región de Alsacia. La primera de las dos jornadas que decidirán la clasificación general comienza en Sélestat, una destacada ciudad de la ruta del vino alsaciana, famosa por su arquitectura histórica. En ella conviven los estilos románico, barroco y gótico, y destaca por no haber figurado nunca como sede del Tour de Francia.
Tras un recorrido marcado por los metros de desnivel positivo la etapa concluye en Le Markstein, una estación de esquí famosa por haber albergado la Copa del Mundo de Esquí Alpino en 1983 y en 1987. Se trata de una zona que ya ha tenido presencia en la ronda gala, tanto en 2014 como en 2019, pero siempre como lugar de paso.
Por tanto, la edición femenina será la encargada de estrenar esta estación de esquí como final de etapa. Y con el atractivo de conocer a ciencia cierta quien estará con opciones de lograr el maillot amarillo; si no queda sentenciado.
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Recorrido de la 7ª etapa: Sélestat - Le Markstein (127 km)
El inicio de la primera jornada realmente montañosa de este Tour de Francia femenino 2022 está marcado por un recorrido llano, de aproximadamente 40 kilómetros, camino de los Vosgos hasta las faldas del Petit Ballon. Este primer puerto es el hermano pequeño de la ascensión final del día, con una pendiente media que se mantiene constante en torno al 8% en sus poco más de 9 kilómetros de longitud. Será una primera prueba para ir reduciendo unidades del pelotón principal.
Esta subida se encadena, tras un rápido y técnico descenso, con el Col du Platzerwasel. Se trata de un puerto corto, ligeramente superior a los 7 kilómetros, pero con porcentajes por encima del 9% en muchos puntos, incluso del 10% en la parte final. Esta combinación de ascensiones, sin descanso, acabará por romper la carrera antes de afrontar el primer paso por la línea de meta y adentrarse en el circuito que conducirá a las ciclistas hacia el Grand Ballon, ell último reto del día.
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Con 1.424 metros de altura, se trata del pico más alto de los Vosgos. Está coronado por una estación de radar en forma de bola blanca y un monumento en la cima. Aunque será el punto decisivo de la jornada, con más de 13 kilómetros al 6,7%, especialmente exigentes los últimos 6 km, no se trata de la meta de la etapa. Una vez culminado, las ciclistas deberán atravesar una meseta cercana a los 8 kilómetros que les conducirá hacia la estación de esquí de Le Markstein Fellering. Quien corone con una pequeña ventaja podría mantenerla en un terreno ligeramente favorable. Será una batalla importante por el maillot amarillo.
Segmentos destacados
Petit Ballon | Col du Platzerwasel |
Grand Ballon | |
Favoritas
Llegó el momento. Tras una primera semana cargada de incertidumbre y etapas con mucha variedad llega el momento culmen: la batalla por el maillot amarillo. Serán dos días con ataques constantes para resolver la clasificación general, que comienzan con esta jornada camino de Le Markstein. Posiblemente, el top10 al término de la sexta etapa sea un simple espejismo después de superar los tres exigentes puertos del día. Entrarán a la disputa tanto de la etapa como de la general las grandes favoritas, alguna de ellas algo tapada hasta el momento.
En este sentido, las figuras de Annemiek van Vleuten (Movistar Team), que ha sufrido durante los primeros días de competición, Kasia Niewiadoma (Canyon-SRAM), Silvia Persico (Valcar Travel), Cecilie Uttrup Ludwig (FDJ - SUEZ - Futuroscope), la española Mavi Garcia (UAE Team ADQ), que necesita recuperar tiempo tras la mala fortuna de la jornada del ‘sterrato’, Elisa Longo Borghini (Trek-Segafredo), trabajando como última compañera de Elisa Balsamo en las llegadas, o Juliette Labous (Team DSM), se convertirán en las grandes protagonistas de la carrera.