Debo confesar que tenía muchas ganas de que llegara esta quinta etapa, de que llegara la montaña.Y después de cómo hemos pasado el día de hoy, sigo con ganas de más para las siguientes. Creo que las etapas de montaña se adaptan mejor tanto a mis características como a las del resto del equipo, porque tenemos un bloque con bastantes corredoras que se defienden cuenta arriba. Una de ellas es Usoa Ostolaza, que desgraciadamente hoy no podido tomar la salida. Ha sido una baja importante para nosotras, porque es una ciclista que sube muy bien y para esta segunda parte de la Vuelta era una corredora que podía tener un rol determinante. Le deseamos que se recupere pronto, a ver si la podemos tener con nosotras en la próxima Itzulia. Por nuestra parte, ¡vamos a disfrutar todo lo que podamos por ella!
Como en etapas anteriores, la de hoy viernes, con el primer final en alto, ha vuelvo a ser de mucho desgaste. En el primer ascenso largo del día, Navafría —un puerto de primera que no conocía— al principio ha habido algunos ataques que han endurecido el ritmo, pero cuando luego ya se han formado los grupos y las favoritas se han quedado delante, se ha calmado. En mi caso, iba en el segundo pelotón, donde también estaban la mayoría de las Movistar (menos Van Vleuten). Se ha subido tranquilo, aunque luego se ha acelerado el ritmo para poder enlazar con el primer grupo antes de la última ascensión, pero no se ha conseguido por casi medio minuto de diferencia.
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Gilbert, en el centro de la imagen, junto a sus compañeras del Laboral Kutxa en la presentación de equipos de la tercera etapa
Estar en La Vuelta Femenina significa mucho para nosotras. Es cierto que hay dos o tres ciclistas que están por encima del resto, pero un equipo como el nuestro debe buscar sus oportunidades, anticipándose y buscando las fugas. También intentaremos a ver si podemos escalar algunas posiciones lo que queda de Vuelta e incluso, por qué no, adelantar a algún World Tour en la clasificación general por equipos.
Personalmente, estoy disfrutando mucho de esta Vuelta, especialmente por ver a tanta la afición en las carreteras y en los pueblos, y por poder vivir etapas como la de hoy y la crono por equipos del primer día, que la gozamos muchísimo. En la etapa tercera, la de los abanicos, sufrí mucho, así que... como he dicho al principio, ¡tenía ganas de que llegase a la montaña!