La temporada 2021 se convirtió en la vuelta de la paulatina normalidad al calendario ciclista y, asimismo, ha acabado siendo un año repleto de despedidas anticipadas. Tejay Van Garderen fue el primero en el mes de junio, mientras que corredores como Fabio Aru, Daniel Martin o Tony Martin lo fueron anunciando a medida que se acercaba el ocaso de la competición. Sin embargo, una de las retiradas con mayor impacto ha sido la de la neerlandesa Anna Van der Breggen que, con treinta y un años, se aparta del ciclismo profesional.
Un año en el que ha lucido el maillot arcoíris a lo largo de una campaña en la que ha logrado diez victorias. A pesar de una primavera algo más gris, arrancó la temporada con su segundo triunfo —tras el de 2015— en la Omloop Het Nieuwsblad. En Huy demostró que la Flecha Valona sigue siendo su territorio particular haciéndose con su séptima victoria consecutiva. Como colofón, se coronó por cuarta ocasión en el Giro de Italia Donne después de un montañoso calendario español en el que entrenó su palmarés en la Vuelta a Burgos y lo completó con su segundo triunfo en la Durango-Durango.
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Sin embargo, las extraordinarias actuaciones no cambiaron ni un ápice una decisión que estuvo muy meditada: la temporada 2021 ha sido la última de Anna van der Breggen como ciclista profesional, al menos por ahora. Aunque seguirá estando ligada al mundo de la competición, ya que cambiará el pelotón por el coche. La neerlandesa pasará a desempeñar el papel de directora deportiva en el SD Worx, función que inauguró en el Simac Ladies Tour y la París-Roubaix Femmes.
Anna van der Breggen en el europeo de ciclismo de 2020 / Fotografía: Alex Whitehead - SWpix
No deja de ser una noticia sorprendente teniendo en cuenta su grandes resultados y su edad. Sin embargo, uno de los principales factores que han influido en la decisión de Van der Breggen es su deseo de formar una familia. Un reflexión que ya explicó cuando anunció su despedida en el mes de marzo. "Es un momento clave en mi vida personal y se ha convertido en un factor importante. Mi marido es nueve años mayor que yo, así que eso también influye, y es una decisión de los dos", detallaba la neerlandesa.
Asimismo, dejó una puerta abierta a un posible regreso en un futuro, reconociendo que volver al pelotón después de haber sido madre es una situación que contempla. “Por ahora, la decisión es firme y mis objetivos están alejados de la competición. Aún así, creo que es posible plantearse la opción de volver, aunque supone un reto importante y necesitas sentir una motivación que es difícil de gestionar cuando tienes un hijo en casa”, explicaba Van der Breggen.
Existen referentes en el pelotón femenino que han regresado al profesionalismo después de haber sido madres, como es el caso de Lizzie Deignan. La británica del Trek-Segafredo dio a luz a su primera hija en 2018 y regresó a la competición un año más tarde. Desde entonces, la campeona del mundo en 2015 se ha endosado la victoria en la Lieja-Bastoña-Lieja y La Course en 2020 y, por supuesto, se convirtió en la reina de los adoquines con su triunfo en la edición inaugural de la París-Roubaix Femmes esta misma temporada.
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La versatilidad de Van der Breggen ha sido parte fundamental en una carrera plagada de éxitos. La potencia explosiva se entrelaza con su habilidad para la contrarreloj, así como una gran regularidad y dominio de las situaciones determinantes. Entre todos los momentos brillantes, la neerlandesa guarda uno con especial cariño: los Mundiales de Imola 2020, en los que logró el arcoíris tanto en ruta como en contrarreloj. "Fue muy especial conseguir esa doble victoria, ya que se trata de un hecho excepcional, tan solo dos ciclistas en la historia hemos sido capaces de lograrlo”, comentaba una emocionada Van der Breggen.
Van der Breggen se convirtió en doble campeona del mundo en Imola 2020 / Fotografía: Simon Wilkinson - SWpix
El circuito de Imola fue testigo, efectivamente, de un acontecimiento único. Se impuso con solvencia en la lucha contra el crono y en la prueba en ruta atacó a más de cuarenta y un kilómetros de meta para hacerse con su segundo maillot arcoíris tras el cosechado en Innsburck 2018. Desde que la contrarreloj se introdujo en los Campeonatos del Mundo en 1994 tan solo Jeannie Longo —en Duitama 1995— había sido capaz de realizar el doblete tanto en el panorama femenino como en el masculino.
Precisamente, el Mundial de Flanders fue la carrera escogida por Anna Van der Breggen para despedirse del ciclismo profesional. Tras el bronce en contrarreloj de los Juegos Olímpicos de Tokyo redujo considerablemente su carga de trabajo para comenzar su retirada paulatina de la competición.
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El conjunto SD Worx trabajó el relevo generacional con la incorporación de Demi Vollering, que a través de la experiencia transmitida por Van der Breggen se ha convertido en una digna sucesora. Bajo su tutela, la joven neerlandesa se hizo con la victoria en la Lieja-Bastoña-Lieja y en La Course. Esa labor proseguirá en 2022, ya que Chantal van den Broek-Blaak también tiene previsto retirarse a finales de la temporada que viene. Es por eso que SD Worx ha sabido aprovechar su fuerza en el mercado para incorporar Kata Blanka Vas, de veinte años, Lotte Kopecky y Marlen Reusser, que continuarán ampliando el dominio del equipo neerlandés.
Fotografía: Alex Broadway/SWpix
En esa transición, Van der Breggen jugará un papel esencial. El trabajo realizado junto a Vollering en la carretera ahora se extenderá en su nueva labor como directora de equipo. Precisamente, en unas declaraciones a cyclingnews la neerlandesa exponía que está deseando nutrir a los jóvenes talentos de la plantilla del SD Worx. "Tenemos mucho potencial en nuestro equipo. Mi intención es que no tengan la presión de ser la líder del equipo. Es importante que se vayan empapando de la experiencia de figuras más veteranas con la mente puesta en el futuro”, subrayaba.
Y esa será ahora una de sus tareas principales en el conjunto neerlandés. “Tanto para mí como para el equipo es positivo que pueda continuar vinculada a ellos, ya que mis conocimientos no han desaparecido. Me hace mucha ilusión poder transmitir toda esa experiencia y ser partícipe en el desarrollo de las jóvenes promesas”, concluye Van der Breggen.
Imagen de cabecera: Alex Broadway/SWpix
