El conjunto Deceuninck se hizo amo y señor de los últimos tres kilómetros de la decimotercera etapa cortando el pelotón y llevándose su tercera victoria en la Vuelta a España 2021 con ¡Florian Sénéchal! El francés, lanzador de Jakobsen, ejerció de esprinter después de que el neerlandés —algo contrariado al felicitar a su compañero en las inmediaciones del podio— sufriera un percance en la parte final que le impidió estar en la disputa. El ritmo del equipo fue tan exigente que abrieron un pequeño hueco con su líder que, como él mismo reconoció al cruzar la meta, le fue imposible de recuperar.
Aún así, el 'treno' de Deceuninck sabe jugar a la perfección en estas circunstancias y Sénéchal ha logrado su primera victoria en una vuelta grande por delante de Matteo Trentin. El italiano, experto en estas situaciones, se soldó a rueda de los belgas tras romper el pelotón en mil pedazos y se quedó muy cerca de la victoria. La locura final provocó diferencias entre varios grupos, de los que Egan Bernal —al que pilló el corte en el único momento que se atisbaron abanicos— supo sacar provecho picando cinco segundo al resto de rivales.
Una jornada que se resume en tres kilómetros frenéticos tras más de doscientos en los que lo único reseñable fueron la actuación incansable de Diego Rubio (Burgos-BH), Álvaro Cuadros (Caja Rural-Seguros RGA) y Luis Ángel Maté (Euskaltel-Euskadi) que pusieron cierta combatividad. Los tres equipos españoles, con más de treinta y tres horas, son los que más presencia en fugas han tenido hasta el momento.
Llegada alocada a Villanueva de la Serena con victoria para Florian Sénéchal / Fotografía: PhotoGomezSport
Una etapa plácida antes del regreso de la montaña a la Vuelta a España 2021 con una jornada que atravesará Extremadura desde Don Benito, en la provincia de Badajoz, hasta Pico Villuercas, al este de la provincia de Cáceres. Esta cima, inédita en una carrera profesional, se encuentra en la última estribación de los Montes de Toledo y se trata del pico más alto de los mismos, con 1.600 metros de altitud. Además, cuenta con la particularidad de ser el primer final en alto de la historia de la región extremeña en la Vuelta.
Esta etapa abre el segundo bloque montañoso de la carrera, un día en el que la última ascensión será la encargada de generar las diferencias entre los favoritos a la general. La dureza previa no será tan exigente, pero se trata de un puerto muy similar en cuanto a características al Alto del Velefique. Como ocurrió en la cima almeriense, el calor volverá a ser muy protagonista con temperaturas por encima de los 30º C.
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Perfil de la 14ª Etapa
La jornada partirá de Don Benito, que se estrena como sede de la Vuelta a España. Los primeros 50 kilómetros serán completamente llanos por tierras pacenses, por lo que se prevé una primera hora de carrera donde el pelotón volará ante el inconformismo por afianzar la escapada. Muchos equipos no han logrado victoria y el tiempo apremia con Santiago cada vez más cerca.
Una vez la carrera se adentre en la provincia de Cáceres el decorado cambiará. Durante más de 30 kilómetros la carretera irá en constante ascenso hasta que la carrera gire a la izquierda en dirección a la localidad de Cañamero. Será el momento en el que los ciclistas se introducirán en la Sierra de Guadalupe haciendo un bucle montañoso con el pueblo homónimo como protagonista.
El Puerto Berzocana (7,7km al 5,2%) será la primera dificultad de día. Se trata de una ascensión con algún tramo de falso llano, pero muy constante en el esfuerzo con pendientes entorno al 6,5%. Tras coronarlo no hay prácticamente descenso, una zona de meseta se abre paso a más de 1.000 metros de altitud camino de Navezuelas. Sin embargo, antes de llegar a este municipio la carrera gira bruscamente hacia la derecha y se adentra en los tres kilómetros infernales del Alto Collado de Ballesteros.
Altimetria Alto Collado de Ballesteros / Fuente: Unipublic
Ese giro conducirá a los ciclistas sobre un camino cementado, perfectamente transitable en bicicleta, con una pendiente media del 14% en sus 2,8 kilómetros de longitud. La parte final, con hasta seis curvas de herradura, es la zona más dura con pendientes que llegan hasta el 20% en algunos tramos y rampas constantes por encima del 15%. Un camino conocido como Las Acebillas que bordea el nacimiento del rio Almonte y que culmina a falta de 2,5 kilómetros para coronar Pico Villuercas, aunque todavía quedarían más de 70km para llegar a la línea de meta.
Precisamente, el descenso de esta cota imposible hasta Guadalupe se produce sobre lo que posteriormente será el ascenso del puerto final. Una vez superado este primer tramo montañoso de la jornada, una zona de repechos al pasar el esprint intermedio en Alía hará de transición en un bucle que regresará hasta Guadalupe por carreteras estrechas rodeadas de los castaños típicos de esta comarca cacereña. A falta de 14,5 kilómetros para la meta dará comienzo el esperado Pico Villuercas.
Altimetria Pico Villuercas / Fuente: Unipublic
El puerto nace a través de una vieja vía militar, ahora completamente asfaltada y que combina tramos exigentes por encima del 8% con zonas que rozan el 4%. A falta de 7 kilómetros para la línea de meta llega la parte más dura de toda la ascensión, conocida como La Quebrá, que cuenta con un kilómetro que roza el 10% de media. Una de las características principales de este puerto es que hay pocas curvas, por lo que la sensación de dureza sobre rectas infinitas lo hace aún más exigente. El último kilómetro vuelve a ser muy duro, con una máxima del 15% que dejará a los ciclistas a las puertas de la antigua base militar.
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Favoritos
Primož Roglič y Enric Mas durante la ascensión a Valdepeñas de Jaén / Fotografía: Charly López / Unipublic
La intención con la que el pelotón afronte esta jornada será esencial para discernir si será una fuga la que se juegue el triunfo de etapa o, por el contrario, los ciclistas implicados en la clasificación general buscarán también el premio de la victoria parcial. La entidad del puerto invita a pensar que será una subida importante para la batalla por el maillot rojo.
En esa lucha, existen dos corredores que, al menos hasta el momento, han demostrado estar por encima del resto: Primož Roglič y Enric Mas. Ambos tuvieron un duelo frenético en Valdepeñas de Jaén y en el Alto del Velefique llegaron juntos a la cima. El mallorquín se encuentra con las mejores piernas de su carrera —como él mismo ha declarado— y Villuercas puede ser una buena oportunidad para empezar a recuperar terreno con el esloveno y sumar su segundo triunfo de etapa en la Vuelta a España.
Una pieza fundamental para el conjunto Movistar en la estrategia es Miguel Ángel López. El colombiano se encuentra justo detrás de su compañero en la general y, aunque tiene muy poco margen de libertad, podría aprovechar su capacidad rematadora en este tipo de finales para hacerse con la victoria y, al mismo tiempo, tensionar a Roglič y aliviar de trabajo a Mas, que podría marchar a rueda del esloveno.
Más allá de estos tres ciclistas, se antoja complicado pensar en algún otro corredor de la general con la capacidad para hacerse con el triunfo por el rendimiento mostrado. El británico Adam Yates, una vez Egan Bernal ha demostrado su debilidad, sería un corredor peligroso en una llegada de estas características. Al igual que el australiano Jack Haig, que evidenció estar al nivel de los mejores en Velefique.
La nómina de aspirantes desde la fuga es muy amplia y de mucha entidad. Ciclistas como Rafal Majka (UAE Emirates), Richard Carapaz (Ineos-Grenadiers), completamente descolgado de la general, Clement Champoussin y Geoffrey Bouchard (AG2R Citröen), el actual líder de la montaña Damiano Caruso —tras su exhibición en Velefique—, Mikel Bizkarra (Euskaltel-Euskadi) o Kenny Elissonde (Trek-Segafredo) serán corredores a tener muy en cuenta en jornadas montañosas hasta el final de la Vuelta a España 2021.
Imagen de cabecera: Charly López / Unipublic
