La Volta Ciclista a Catalunya cuenta con una historia centenaria, repleta de detalles desde su creación en 1911. Este 2024 se disputa su 103ª edición entre el próximo lunes 18 y domingo 24 de marzo, lo que la convierte en la tercera carrera por etapas más longeva del mundo, por detrás del Tour de Francia —con 110 ediciones desde 1903— y el Giro d'Italia —con 106 ediciones desde 1909—. Desde 1939, tras los años de la Guerra Civil, hasta 2019 se celebró de manera ininterrumpida. Tan solo la pandemia de la Covid-19, en 2020, obligó a cancelar la carrera y, por tanto, a aplazar a 2021 la que iba a ser la edición 100.
A lo largo de su extensa historia, muchos ciclistas han ido relatando diferentes capítulos e inscribiendo su nombre en el palmarés de la carrera. Miquel Muç, Miquel Poblet, Jacques Anquetil, Eddy Merckx, Luis Ocaña, Francesco Moser, Sean Kelly, Miguel Indurain, Alex Züle, Joaquim Rodríguez, Alejandro Valverde… Sin embargo, entre todos ellos siempre ha destacado la figura de Mariano Cañardo, el más laureado de la prueba catalana. El ciclista navarro, aunque barcelonés de adopción, consiguió siete triunfos entre 1928 y 1939.
Relacionado – Primoz Roglic sostiene el ímpetu de Evenepoel
Relacionado – Suscríbete a VOLATA, tu revista de cultura ciclista
El gran favorito en esta Volta a Catalunya tiene nombre y apellidos: Tadej Pogačar. El esloveno debuta en la ronda catalana tras una auténtica exhibición en Strade Bianche en su primer —y hasta la Milán-Sanremo— único día de competición. El de UAE Team Emirates ha optado por un calendario alternativo en su preparación al Giro d’Italia y el Tour de Francia. El recorrido montañoso podría beneficiar sus características, pero junto a Pogačar La Volta presenta un cartel inmenso con grandes corredores como Sepp Kuss, Mikel Landa, Joao Almeida, Aleksandr Vlasov, Geraint Thomas, Egan Bernal, Simon Yates, Enric Mas y el esperado regreso a Europa de Nairo Quintana.
Etapa 1 | Sant Feliu de Guíxols - Sant Feliu de Guíxols | 173,9 km (18/03)
Por tercer año consecutivo, la localidad costera del Baix Empordà, Sant Feliu de Guíxols, acoge la gran salida de la Volta Ciclista a Catalunya. La etapa mantiene la esencia de las ediciones anteriores, atravesando un terreno marcadamente quebrado en la provincia de Girona. Sin embargo, se ha modificado ligeramente el encadenado de puertos iniciales con los ascensos al Alt de Romanyà (6 km al 5,4%), el Alt de la Ganga (3,5 km al 4,3%) y el Alt dels Àngels (5,5 km al 5,7%).
En esta ocasión, la organización ha incluido el aliciente de la subida al Alt de Sant Grau (8,1 km al 4%) como último esfuerzo de la jornada a tan solo 20 kilómetros de la línea de meta. Este puerto podría ser el trampolín para que algún ciclista intente atacar buscando sorprender. Aun así, lo más probable es que el primer maillot de líder se decida en un último kilómetro que presenta una pendiente del 5%. En 2023, la rampa final fue testigo del primer duelo ajustado entre Roglič y Evenepoel, con victoria para el esloveno.
Etapa 2 | Mataró - Vallter 2000 | 186,5 km (19/03)
El efecto espejismo se mantiene también en la segunda jornada, la primera de alta montaña. Esta segunda etapa será idéntica —a excepción del paso por la ciudad de Girona— a la de la edición de 2023, con final en la estación de esquí de Vallter 2000. Los 120 kilómetros iniciales mantienen una dinámica llana hasta Olot, donde poco después se afronta la subida al Coll de Coubet (13 km al 5,5%). Este puerto, que une las comarcas de la Garrotxa y Ripollès, marca la aproximación a los Pirineos antes del inicio de la ascensión final a Vallter, que presumiblemente mostrará un paisaje nevado tras el último temporal.
Relacionado – La Mirilla: la Volta a Catalunya 2023 con una mirada diferente
Aunque en sus 11,3 kilómetros presenta una media del 7,6%, acumula rampas sostenidas por encima del 11% en algunos puntos del tramo central hasta superar los 2.100 metros de altitud en su cima. Este puerto, caracterizado por las numerosas curvas de herradura, acoge su sexto final de etapa en la Volta a Catalunya tras sus apariciones en 2013, 2014, 2019, 2021 y 2023. No suele deparar grandes diferencias entre los principales favoritos.
Etapa 3 | Sant Joan de les Abadesses - Port Ainé | 176,7 km (20/03)
La tercera etapa en el corazón de los Pirineos tiene todos los ingredientes para convertirse en una de las jornadas decisivas en esta 103ª edición de la Volta a Catalunya. El inicio suave desde Sant Joan de les Abadesses, que se estrena como sede en la ronda catalana, dará paso en el primer tercio a un puerto muy duro y explosivo como el Port de Toses (4 km al 9,1%). Tras un vertiginoso descenso camino de Alp el pelotón discurrirá por un largo tramo de valle favorable hasta la base del Port del Cantó (25,5 km al 4,2%).
Esta irregular ascensión combina un inicio exigente con secciones de falso llano. Será la antesala del regreso tres años después de Port Ainé. El colombiano Esteban Chaves fue el último corredor en alzar los brazos en esta icónica subida de la comarca de Pallars Sobirà. Se trata de un esfuerzo constante durante más de 18 km que acumula una pendiente media cercana al 7%. Sin duda, una etapa que dejará las primeras diferencias importantes en la general y que tumbará de forma definitiva las aspiraciones de quien llegue justo de forma.
Etapa 4 | Sort - Lleida | 169,2 km (21/03)
La cuarta etapa será un respiro para gran parte del pelotón. Tras dos exigentes jornadas montañosas, la carrera abandona la cordillera pirenaica con un perfil con tendencia descendente hasta Lleida, que regresa a la carrera desde 2013. Tan solo una pequeña aventura en los impresionantes paisajes de la Sierra del Montsec en el tramo central partirá el predominante terreno llano. Así, la única dificultad será el Port d’Àger, aunque su distancia con la meta complica que tenga una incidencia decisiva. Salvo que la fuga consiga poner en dificultades al pelotón, todo apunta a la segunda volata de esta Volta a Catalunya.
Etapa 5 | Altafulla - Viladecans | 167,3 km (22/03)
Etapa propicia para una fuga. La cordillera prelitoral catalana será protagonista en una jornada plagada de terreno rompepiernas aunque tan solo dos ascensiones serán puntuables: Coll de les Ventoses (7,8 km al 4,3%) y Alt de la Creu d'Aragall. El primer puerto en la sierra de El Montmell-Marmellar servirá para acabar de definir la escapada a través de la comarca del Penedés. Por su parte, La Creu d’Aragall se presume como decisiva para decidir el ganador de la etapa. La subida presenta 6,7 km al 6,2%, pero cuenta con máximas que llegan hasta el 13%. Se corona a falta de 30 km para la meta, por lo que los escaladores tratarán de maximizar sus opciones en la batalla por el triunfo final.
Relacionado – Mariano Cañardo, la lengua más rápida de La Volta
Etapa 6 | Berga - Queralt | 155,7 km (23/03)
Para muchos, la jornada reina de esta Volta a Catalunya. Sin duda, el perfil de esta sexta etapa ha enamorado a los aficionados porque reúne las condiciones para convertirse en uno de esos días señalados para la épica. La comarca del Berguedà ha pasado siempre muy desapercibida en la ronda catalana a pesar de su enorme potencial montañoso. Un territorio inexplorado en competición que se presenta con un recorrido que encadena hasta cinco ascensiones; y otras tres no catalogadas para el maillot de la montaña.
La etapa es una combinación de resistencia y explosividad. Después de un inicio para ir calentando motores por la zona del Catllaràs marcado por el Coll de la Batallona (11,6 km al 3,2%) y el Collet de Cal Ros (10,1 km al 4,2%), la parte central estará protagonizada por la venerada ascensión al Coll de Pradell (14,6 km al 7,1%), que se estrena en el ciclismo profesional. Las duras rampas por encima del 9% de la Collada de Sant Isidre serán el anticipo de la ascensión final al Santuari de Queralt (6 km al 7,3%). Si un tal Tadej Pogacar no ha sentenciado ya la carrera, podría ser el día para provocar un vuelco en la general.
Etapa 7 | Barcelona - Barcelona | 145,3 km (24/03)
El desenlace de la Volta a Catalunya se mantendrá fiel a su estilo. El inicio de la séptima y última etapa será tranquilo, aunque algo quebrado adentrándose en les Muntanyes d’Ordal a través del Coll de la Creu de l’Ordal (7 km al 4,4%). Tras una breve incursión por el Macizo del Garraf y una larga transición llana, los ciclistas se introducirán en el tradicional circuito de Montjuïc. Seis vueltas alrededor de uno de los pulmones de Barcelona, con la estrecha y dura subida al Castillo de Montjuïc como principal protagonista. Una ascensión de 3,5 kilómetros y rampas que superan el 14% antes del rápido descenso bordeando el Estadio Olímpico y culminando en la Font Màgica de Montjuïc.
Foto de cabecera: Volta a Catalunya
